El tarot fue mi
primer maestro en el camino de mi misma. Me encontró muy joven, con 17 años. Me
muestra las energías que actúan ahora, como son dinámicas, como se
interconectan y sus tendencias de evolución.
No se sabe mucho
de su origen, mitos y leyendas lo rodean, que le dan ese halo de misterio, pero
que nos acompaña silenciosamente a lo largo de la historia. A veces como simple
juego de cartas otras como el instrumento de no sé qué fuerzas ocultas, otras con
sorna y desprecio, pero nunca nos ha dejado indiferentes.
El Tarot es un
gran instrumento de autoconocimiento en todas las áreas de la vida. Trabaja con
un lenguaje universal, imágenes >oníricas, lenguaje no verbal, que constituyen el propio idioma de la
consciencia y de los mitos. Es como un libro abierto que va contando historias
humanas con precisión de relojero. Siempre ha llamado la atención de todo tipo
de estudiosos, grandes pensadores le dedicaron tiempo y atención.
El tarot
evolutivo es una radiografía de las energías que están actuando en el momento,
de donde vienen y cuáles son las tendencias de futuro. Pero también puede
mostrarte tus verdaderas motivaciones, la dinámica de las relaciones, la parte
que no eres consciente de las situaciones y de las interconexiones que nos unen
a todo. Un verdadero mapa del tesoro hacia ti mismo, un GPS para transitar tus propios
caminos de búsqueda del bienestar, la armonía y la felicidad.
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